Proyecto «Il Bosco di Simurgh»
Después de más de 25 años de viajes y trabajo artístico por fin encontramos el lugar ideal para construir una sede estable.
En Italia, en el sur de la región de Abruzzo, nos esperaba un bosque.
Robles, olmos, pinos, fresnos en flor y enebros centenarios, ocultos en un valle rocoso de los Apeninos, se erguían frente a nosotros como guardianes de un mundo secreto. Desde la espesa maleza, los animales salvajes espiaban nuestro atónito avanzar entre alfombras de orquídeas endémicas, mientras largos tallos de espárragos se abrían paso entre las piedras de terrazas de muros a seco cubiertos por la hiedra, vestigios de antiguos asentamientos humanos.
En un claro de aquel bosque, casi engullido por la vegetación, había un edificio en ruinas que en un tiempo lejano sirvió para la fabricación y cocción de tejas.
Aquella gran ruina, gracias a mucho esfuerzo, físico y económico, de nuestra parte, así como a la preciosa ayuda de voluntarios y amigos, se está transformando poco a poco en la sede del proyecto que hoy se llama «Il Bosco di Simurgh».
Aquí ya no se trata sólo de teatro, que seguirá siendo nuestra herramienta de estudio, investigación y expresión, sino de la posibilidad de poner a disposición de nuestro territorio, pero también de los visitantes del extranjero, un espacio ideal de salud, belleza, contemplación y creatividad.
Un lugar de encuentro con diferentes disciplinas, científicas y humanísticas; un espacio para acoger a los niños en actividades recreativas/educativas; un entorno no contaminado donde podemos acoger a familias, individuos o pequeños grupos que deseen relajarse y oxigenarse en la Naturaleza.
Es esta la razón que ahora nos anima a pedir apoyo económico a amigos y estimadores de nuestro trabajo, para que podamos completar la restauración de esa Casa que ofrecerá espacios de estudio y alojamiento.
“Muchos granos de arena amontonados forman una pagoda”
(Antiguo proverbio chino)